Entrevista - El Popular - 1969

"La joven música uruguaya"		Maria Luisa Santamarina
M.L.S. — A través de las últimas prestaciones siento como si hubiera una tendencia univers:alista en la música actual. Mi pregunta sería si está totalmente desterrada la etapa nacionalista en la música, cuando socialmente en estos momentos hay tantos movimientos nacionalistas. Renée Pietrafesa. — Me parece que la etapa nacionalista puede ser necesaria, pero no es todo, es una etapa de la cual se puede partir o por la cual se pasa para llegar a otra más adulta. Creo que las dos tendencías existen. Para pasar de una manera más joven a otra más madura se tiene que buscar en sí mismo el material, su propia fuente, en este momento, que puede ser una etapa nacionalista, se saca del folklore en la música, o de la tierra misma, en otro tipo de manifestación, ese material expresado en forma muy natural y espontánea: Luego se le utiliza estilizándolo, se le trabaja y se obtiene otra manera de expresión más elaborada, más pura, universalista si se quiere. Se puede llegar a esa última tendencia independientemente por "el lado de la ciencia, por ejemplo. Hay compositores que recurren (a medida que van siguiendo una evolución histórica o un proceso social, depende del lugar en que estén) al material folklórico en sí y otros que buscan por él lado abstracto directamente. Actualmente, como siempre por otra parte, los compositores sienten la necesidad de inventar nuevo material, el cual los lleva a nuevas formas, a nuevas maneras de disponer el tiempo, a nuevas maneras de escriture. El compositor inventa signos para expresarse porque los tradicionales no le alcanzan. Ya hay nuevos signos empleados por todos. Las conquistas del mundo sonoro se han ampliado en el terreno de lo natural y también en el de lo cultural, y la frontera entre ambos terrenos son cada vez más imprecisas, constituyéndose ambas en estimulantes de primer orden para la evolución musical en el sentido de progresiva extensión o ampliación "hiumanizadoras del material sonoro en general, convertido paulatinamente en procedimiento expresivo. M.L.S. — Todo compositor aspira a que lo entiendan. Pregunto si a Uds. les interesa llegar a las masas; al pueblo y por qué camino? R.P. — Creo que todo creador tiene que tener una doble actitud, primero el ser autodatico consigo mismo dependiendo de su inspiración, en el sentidu de sintesïs momentanea en una convergencia de muchos planos, o ' de su evolución a trabajo personal sin pensar si va llegar o no, a los demás. Expresarse por necesidad de la mannera más pura. Si es entendido y aceptado espontáneamente rnejor; aunque es difícil, par la distancia que  siempre existe entre el trabajo individual especializado y el colectivo, Ahora, bien, la tarea del compositor se enriquece si éste tiene las energias y el cariño suficientes para poder llevar a los demás a hacer ese proceso que el hizo bien individualmente, y eso se puede lograr por la vía didáctica dando obras más accesibles, en el sentido de antecedores históricamente, y mostrando con ejemplos graduales ese proceso que él siguió personalmente. M.L.S. — Siento corno si hubieran dos tendencias. .'ir un lado noto la ;preocupaciain por utilizar elementos que les aporta la ciencia, es decir que buscan amalgamar cl arte con la ciencia y fusionarlos. Por otro lado veo que hay, a mi modo de .ver, una excesiva búsqueda y deleite por el sonido en sí mismo y una rbsoluta indife_ rencia por la forma e incluso por el contenido,. Eso no ' significa un retroceso? R.P. — Bueno. Creo que en esta última década hay unas cuantas tendencias que se han abierto. La música electrónica, la concreta, la que se relaciona directamente con las matemáticas (Xenakis), la serial, la aleatoria (remite al intérprete nue había sido dejado de Iado por la música de laboratorio), la que relaciona el tiempo con el espacio (oído-ojo), el neoclasiciemu nodal de algunos alemanes, etc.. Los adelantos de la ciencia han permitido conocer los procesos creativos de la imaginación y estudiar problemas que conviven simultáneamente en varios medios de expresión artística y esto hace posible una unidad que hasta ahora era utópica porque la relación no es una participación externa, sino que nace de la utilización de un problema que es común a ambos. Se produjo entonces una integración a nivel de origen. Vivimos en un mundo eléctrico y eso cambió el espacio perceptivo. El hombre descubrió un mundo cargado de voces y se produjeron formas multidimensionales, reflejo del espacio sonoro que lo rodea.Cada obra en si tiene una forma especial y un contenido, si es que su expresión es. producto de un acto puro e integral. Cuando Erie Satie le llevó una partitura a Debussy éste le dijo: "No tiene forma". Satie se fue y volvió con la misma obra a la cual le había agregado: "Piezas en forma de pera". El compositor se sensibilizó también al sonido en si y sacó de ello una apertura a lo sensorial: que es, también una posibilidad más, una corriente más - un  parametro más - a tener en cuenta, como lo son la forma, el volumen, la intensidad, la manera de medir el tiempo, etc.. M.L.S. — Es este un momento de transición, de búsqueda o ya están seguros del camino a seguir? R.P. — Bueno, yo creo que no se puede estar seguro del todo aunque existen algunas cosas sobre las cuales ya se puede empezar a construir mas sólidamente. Es una búsqueda de nuevo material, de nuevos signos, pero frente al proceso de aceleración tremenda que se ha producido. y que no permite la distancia necesaria para la objetivación (en el sentido de valoración de un hecho) del acto expresivo, no se puede saber que es lo que va a quedar y cual es exactamente el camino a seguir. Pero esto no importa. - Lo que importa es la actitud de búsqueda y de ir mostrando las posibles soluciones a medida que se va construyendo, esa interrogación continua que supone la tarea de dar una pisada en el desierto como definición del acto creativo. Se podría hablar de una nueva estética con un futuro muy amplio, más amplio que nunca. En mi caso, traeo de asimilar los descubrimientos actuales y recurro quando lo necesito a l'a simplicidad melódica por decir así, de la composición más		A propósito del estreno de su obra "Mandala Infinito" estrenada el pasado Martes 14 de Octubre hemos entrevistado a Renée Pietrafesa, joven música uruguaya que además ha realizado presentaciones como directora de la orquesta de cámara de "Ars Musicæ", un sugestivo aspecto, esta otra forma de expresarse, totalmente nueva en nuestro medio - hasta ahora ninguna mujer había incursionado en la dirección orquestal - que la colocan en un nivel de primera calidad, ya que son pocas las artistas que pueden mostrar una ductilidad tan grande, producto de una formación musical completa y profunda, y de una naturaleza musical muy firme y creativa. Ennuestra entrevista le hemos pedido información sobre su obra y sobre la música actual en general		Existe siempre contenido si se parte de la base de que se compone por un exceso de intensidad que se necesita canalizar y marcar con alguna forma de expresión. Ahora bien, de qué índole o qué forma se cumplea es muy personal. Existe pues contenido sí se parte de esa base y no si se considera el acto creativo como solo un juego intelectual desprovisto de sentido o una manera de ubicarse socialmente. Así todos los elementos como el timbre en sí son medios expresivos. M.L.S. —- ¿Cómo es posible que siendo un momento de grandes movimientos de masas, esta músiea sea, digamos, individualista, buscando efectos detalle, etc? R .P. — Creo que existen ambas cosas y otras. El hombre científico vive al mismo tiempo que el poeta. Hay la necesidad de manejar vastos bloques al mismo tiempo que pequeñas molduras, coma en las catedrales. Además: "La piedra angular del templo no es superior a la piedra más chica de sus fundamentos". M.L.S. — ¿Se pueden dar las dos fases en un mismo creador? R .P. — Creo que se puede tener más tendencia hacia una otra, pero no niego la posibilidad de que existan los dos en una misma persona. Así corno los clásicos crearon grandes pasiones y pequeñas sonatas de cámara.
		Renée Pietrafesa
		tradicional; osciló de un a otro haciendo alternar la espontaneidad con busquedas más complicadas - o darlas, como en el caso de mi última obra, simultáneamente. Siento que puede ser un elemento viable. M.L.S. — Vemos un futuro muy positivo y premisorio - y creemos negativa toda afirmación de que la música no tiene salida. Encontramos que hay una especie de Renacimiento. R.P. —Ya lo creo. Aunque los logros no se si serán de valor definitivo (aunque creo que los hay) como para afirmar que es un renacimiento, la actitud de estar a la búsqueda, de querer encontrar algo, es un renacímiento en sí. Eso es lo importante por ahora. M. L. S. — Pienso quo el contenido social entonces está implicite es la actitud de Uds.. En ese aspecto están siguiendo los movimientos sociales actuales. R.P. — Si quieres, si. Esto no implica que la música que hagas sea concretamente en un estilo determinado en relaación al momento social, sino que al ser et creador de un hombre integral pasa por su tamiz toda la realidad que lo rodea y de esa manera, uniéndose tal aporte interior subjetivo, participa con su creación a un momento historico que él marca con su huella personal (aunque esto signifique hacer melodías de amor o encerrarse en la búsqueda de lo tímbrico en sí). Para mi la música es una manera de. vivir. Cada uno elige y reacciona según sus posibilidades individuales.		M.L.S. — Ahora me gustaría que hablaras de tu obra. R .P. — Se llama "Mandala" (infinito), compuesta para órgano en tres pistas, dos grabadas y una ejecutada en el momento del concierto. Mandala, objeto de contemplación, apertura a otra dimensión; infinito, idea de un sin fin que puede darse en una obra como ésta, abierta á :muchas posibilidades de ejecución. Empleé varias maneras yuxtapuestas, basándome por ejemplo en una serie que luego abandono y manejo intuitivamente relacionándola con otros planos aleatorios (no totalmente dejado al azar sino controlado) el cual enriquece el aspecto rítmico; todo no se puede escribir y la parte de improvisación siempre en un estilo indicado por el autor, es estimulante y un elemento de frescura; lo aleatorio en esta obra es por ejemplo en algunas zonas el aspecto rítmico, puesto que el material sonoro, e la registración (se trata de una obra para órgano) o el tiempo global están indicados. Empleo también los dos planos simultáneamcnte: un tiempo global medido y, otro accidental aleatorio. Lo aleatorio total no me interesa pues es dejar totalmente la parte creativa a otra persona y además depende del talento del intérprete en cada ocasión. Me importan dos maneras de hacer transcurrir el material sonoro en el vacío (limite espacial del tiempo) y en un orden cinético o pulso en la vivencia, medibleo no, que al yuxtaponerse producen una síntesis momentánea con un resultado sinérgico. Me interesa el gesto de los cuerpos sonoros, quiero decir busco hacer sonar el movimiento, la unión del espacio y el tiempo, la partitura es como un bloque circular que se puede leer del principio al fin como una totalidad. Otro elemento que me interesa es la rapidez. Busco pues la integración de varias .posibilidades. M.L.S. — ¿Te interesa la música aleatoria? R.P. — En la medida que me aporta elementos sobre todo por el lado rítmico que pueden ser trabajados y estructurados de una determinada manera. Personalmente por ahora no siento la necesidad de entrar a trabajar en un laboratorio electrónico, me construyo uno propio donde mezclo muchos elementos y utilizo las posibilidades instrumentales y vocales. M.L.S. — ¿El arte siempre busca conmover? R.P. — No solamente, puede buscar otras reacciones. En una época buscó conmover, en otra produjo reacciones más cerebrales, o más sensitivas, o sensoriales. El clásico trataba de superar sus emociones, sublimaba y objetivaba el proceso afectivo. Los románticos se mostraron en sus sentimientos y querían comunicarlos a los demás. Monteverdi buscaba conmover o no buscaba nada, conmovía directamente. Ahora; creo que el músico actual, muestra sus busquedas; el más científico es clásico en el sentido de más objetivo .Se busca por otro lado despertar un interés en el espectador, hacerlo participante en el acto creativo, no darle alimento totalmente digerido, obligarlo a una actitud activa. Busco un poco esto último, junto con una sensibilización; una nueva inspiración en el sentido que dije anteriormente. El teatro consigue esa participación más fácilmente que la música puesto que es un arte conceptual y la música es siempre más abstracta. Se establece un proceso constructivo del creador y del espectador y del intérprete que se transforman en cocreadores. No quiere decir que no se pueda emplear también el momento más terminado y acabado. Todo está en juego y se manejan un montón de conceptos a la ves que no es confusión sino enriquecimiento. Esto es lo que más me importa, y esa integración que se produce a nivel del origen como decía antes.

El Popular, diciembre 1969